En
Vigo una policía nacional, Vanesa L, de la Unidad de Prevención y Respuesta de
la Policía Nacional fue abatida durante el tiroteo por un delincuente que
retenía a la subdirectora de la sucursal. En un principio no se sabía si llevaba
chaleco antibalas, si lo había dejado en
el coche, si lo había dejado en la comisaría o si no lo tenía porque se estaban
esperando los que iban a mandar el Ministerio del Interior. Pero pronto se sabe
por los sindicatos policiales que sólo el 15% de los agentes cuentan con
chalecos y que algunos los adquieren ellos mismos por 600€. La Unidad de Vigo,
formada por treinta agentes tiene 10 chalecos exteriores de aproximadamente
tres kilos y cuatro interiores de uso personal que no han sido asignados y
están en su embalaje original y que ninguno es específico para mujer, según
informa Faro de Vigo y EUROPA PREES, con datos del SUP. El Ministerio va a
abrir una investigación, pero de momento honras fúnebres y Medalla de Oro al
Mérito Policial. La comparecencia ante los medios, pasadas seis horas, es para las condolencias y escudarse
en el secreto del sumario para defender al Jefe de la Policía, al Subdelegado
del Gobierno y a la Xunta. La investigación será larga y con cierta
probabilidad se quedará en un informe interno. El Presidente
de la Xunta, Núñez Feijoo sentencia “la seguridad ciudadana tiene unos costes,
y el máximo coste que tiene es la vida”, la vida hay que protegerla en la
seguridad ciudadana; dos vidas por 127.000€ que podrían haberse evitado con
algún coste menos elevado “estuvo
a la altura de las circunstancias y cumplió con su deber a cambio de entregar
la vida”; el cumplir con el deber en ningún
caso justifica la pérdida de la vida, cumplen con su deber, también, los que garantizan
los medios para que los profesionales cumplan con su deber. Hay chalecos que
pueden salvar vidas, pero el Ministro Morenés, de Defensa y que entiende mucho
de armamento, se va a Israel a comprar por 30 millones de euros, que darían
para comprar ¿cuántos chalecos?