Se planteaba
la salida de ENCE de la ría de Pontevedra, como una lucha de David contra Goliat;
por un lado un pequeño Concello y enfrente un lobby empresarial y
refugio de políticos. Un ejército de ovejas dirigido por un león, frente a un
ejército de leones bregados.
EN 1958, el
INI ocupa los terrenos de Lourizán para la Empresa Nacional de Celulosas SA. En
el año 1995 comienza su privatización con la venta del 18,8% de las acciones de
la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales). En julio de 2001
accede a la presidencia José Luis Méndez tras el proceso de privatización de la
compañía, el grupo accionarial lo constituyen Caixa Galicia, Bankinter y Banco Zaragozano.
El grupo
accionarial pasa a Alcor Holding, propiedad de Alberto Cortina y Alberto
Alcocer y a Retos Operativos XXI, empresa de José Luis Arregui, con el 12,5%
cada uno. José Luis Arregui había fundado Gamesa en 1976, pasó
después a Retos Operativos XXI, tiene el 1,65% en Iberdrola y vendió a Acciona
su capital en la eólica Cesa. Fue Secretario General de la Confederación Empresarial Vasca;
se pensaba que a los 65 se iba a retirar, pero los medios empresariales vascos
llaman búho a Arregui por su visión al encontrar negocios con clara visión de
futuro. Esa visión fue la que la le
empujó a analizar la situación de ENCE y
desembarcar en ENCE como Presidente del
Consejo de Administración, por la situación de ENCE y por el potencial de
desarrollo de la empresa para superar los nuevos retos del sector y para dar
respuesta a las nuevas necesidades del mercado, según sus declaraciones.
Retos
Operativos XXI, gestiona Ence Energía y
Celulosa, y la Cartera Industrial Rea de la cual José Luis Arregui es
Vicepresidente Primero del Consejo de Administración, entre sus empresas participada está Europac, SA,
compañía dedicada a la fabricación, manipulación y transformación de papel,
cartón y celulosa; entre sus líneas de negocio
están la gestión de explotaciones forestales, el papel, el cartón y el
embalaje. Rea cuenta con un 6,59% de Europac SA.
Pero este
búho es también un águila para buscar a quién le pueda acompañar, y tiene buen
ojo. En el Consejo de Administración está Fernando Abril-Martorell Hernández,
Ex Consejero de de Credit Suisse, Ex Consejero Delegado de Telefónica, Ex
Consejero Delegado de PRISA, de donde salió ccobrando 2, 2 millones de euros
por el trabajo de 1 de enero a 30 de septiembre, Presidente de Indra, al
sustituir a Javier Monzón, el de la venta del avión privado a CR7,
descabalgado, según la prensa, por el ministro Morenés, el que lo fue Eduardo Serra (que casualidad) y
Antonio Hernández Mancha, Ex Presidente de Alianza Popular, 1987-1989 Consejero
de Enagás, otra casualidad; también es Consejero de Aena.
También está
en el Consejo, Isabel Tocino, Ex Ministra de Medio Ambiente con Aznar, que pasó
por el Santander, está en el Consejo de Estado, en el Consejo de Enagás,
miembro destacado del Opus Dei, a Dios rogando; es Consejera de Diagonal Gest, que comptró 234
de las 3.000 viviendas que el IVIMA vendió a fondos buitre y que está en los
juzgados; y con el mazo dando.
Y también Pascual Fernández Martínez,
que fue Secretario de Estado de Aguas y Costas de 2000 a 2004 que con la
llegada del PSOE fue cesado, pero al año ya encontró acomodo en ENCE, y
actualmente es Consejero Dominical por la representación de Alcor Holding.
La “gran contribución
de Galicia al gobierno de Ence” la
representa el madrileño, Carlos del Álamo Jiménez, que había sido Conselleiro de Medio Ambiente de 1997 a 2003,
quien decía en 1998 “combinar la conservación de la naturaleza con el
desarrollo sostenible” “la contaminación es peor que el fuego” “ El medio
ambiente gallego es nuestra industria del futuro”; aunque fue cesado por su
gestión del Prestige, se le recolocó en la Presidencia del Patronato del Parque
Nacional lllas Atlánticas hasta 2006. EN 2009, José Luis Arregui, ahora halcón,
lo propone a la Junta de Accionistas
como Consejero Independiente, mirando al 2018.
Miguel Ángel Arias
Cañete y la Ley de Costas. EL 30 de
mayo de 2013 se publica la Ley de Costas que da la posibilidad de prorrogar las
concesiones de dominio público terrestre por más de 50 años en el caso de ENCE.
Una ley a medida. Fue recurrida ante los Tribunales por los Gobiernos de
Asturias, Canarias, País Vasco y Cataluña; y la Xunta de Galicia no; ¿no tiene
costas? A lo mejor no son suyas. Miguel Ángel Arias Cañete, fue su impulsor y
ahora es Comisario europeo de Clima y Energía, y ahora dice” Mi mensaje para
las empresas y los inversores es que inviertan en energías limpias que están
para quedarse”, cuando se le preguntó por su pasado en empresas petroleras
contestó “los conversos a las causas son siempre los mayores defensores de esas
causas” (EL País, 17/11/2015). Habría que preguntarle ahora por su papel en
ENCE en la Ley de Costas. Pero también hay que tener cuidado, porque la
operación Frontino, sobre la empresa pública Aguas de las Cuencas
Mediterráneas (Aquamed) del Ministerio de Agricultura ya se llevó por delante a altos cargos del
Ministerio de Agricultura y de Presidencia en la Moncloa, está en los Juzgados y
puede que pueda llegar a Bruselas.
Con vía
libre, ENCE el 8 de noviembre de 2013 solicita de la Administración Central la
prórroga por el plazo máximo legal; se
vuelve a solicitar en agosto de 2015, que no era mala fecha, todo el mundo de
vacaciones; era mejor esperar; sería mejor, una vez pasadas las elecciones y después se renovaría la mayoría absoluta y
el Gobierno.
Pero los
planes se torcieron, las cosas se complicaron, y tocó arrebato; la presión se
renovó sobre el PP y desde el PP, y el
20 de enero de 2016, con el Gobierno en
funciones, tal como habíamos anunciado aquí en el mes de noviembre, se firma la
prórroga por 60 años.
El documento
lo firma Raquel Orts, Directora General
de Sostenibilidad de la Costa y el Mar que, ¡o casualidad¡ había sido Subdirectora General de Dominio
Público Terrestre.
A los cinco
días de la firma, las acciones de ENCE suben en bolsa el 6,6%.
Este es el
negocio de la pasta de papel, el de la
pasta, unos sentados en el Consejo de Administración que se quedaron con una
empresa pública en terrenos públicos, con una clara situación de ventaja, y
otros bien sentados después de su paso por la política y Administración que
tienen como función conseguir, reconducir, ampliar concesiones; el del papel,
mojado, para las administraciones que quieren defender a los ciudadanos, para
los ciudadanos que quieren una calidad de vida mejor que la que le prometió
Franco en el año 1963 con un fábrica de madera de pino negral, el de los
ecologistas y defensores del medio ambiente y de la riqueza de Galicia en sus
rías, en sus bosques, en su naturaleza, el de los gallegos bós e generosos.
Una fábrica
que fabrica eucaliptos por toda Galicia, un eucalipto de pan para ahora y
hambre para mañana que está convirtiendo Galicia en un desierto verde y
sin vida, una fábrica con 339
trabajadores y un número indeterminado de puestos de trabajo indirectos, que
perjudica a la ría, a los pescadores y mariscadores, a todos los que viven en
la ría , y a todos los vecinos a donde llega su contaminación, y a todos los
que se acercan a la Ría de Pontevedra y se ven obligados a contemplar está
fábrica como un vestigio de un pasado negro.
Se produce
una situación similar a la que describe el catedrático de Teoría Económica,
Carlos Sebastián en su libro España
estancada, Galaxia Gutenberg, “El mejor mundo que se les ofrece es
convertirse en un hombre de negocios cercano al poder que puede obtener
plusvalías con escaso riesgo y nula actividad empresarial propiamente dicha. O
ser un empresario con un flujo de ingresos relativamente garantizado con poco
esfuerzo comercial y sin el menor incentivo a diferenciarse para captar
clientes, porque ha sido beneficiado por
una acción discrecional tomada desde los poderes públicos”.
ENCE ya sabía que iba a obtener la prórroga, ya
había anunciado que en sus cuentas ya estaban destinados 61 millones para las
mejoras. Todo el potencial de la empresa se destina prioritariamente al humo,
pero no al que todos los días y noches, excepto los de la parada técnica, sale por sus chimeneas, sino a la propaganda,
al patrocinio populista y a la publicidad en todos los medios de comunicación,
en los autobuses urbanos, en las marquesinas, en las vallas publicitarias…… una
contaminación visual que invade Pontevedra.
Su Director,
Antonio Casal en una entrevista en un periódico local el 31 de enero afirmó ”
que la concesión no irá para atrás””nosotros hemos seguido un procedimiento
administrativo en el que hay que cumplir una serie de condiciones que nosotros
cumplimos al 120% ó 200%” “no es una decisión política, es un procedimiento
administrativo….las circunstancias políticas del momento han coincidido así
como podían haber coincidido de otra manera””la posibilidad de una derrota
judicial es algo que no contemplo”.
Pero lo mismo
que se desbordó la satisfacción de ENCE,
se desencadenó la reacción política y ciudadana.
Se cuestionó
la actuación del Gobierno en funciones para tomar la decisión de la prórroga,
se entiende que las decisiones han de ser temporales y restringidas en el
tiempo, pero que en la Ley 50/1997 de 27 de noviembre se específica ”se
limitará su gestión al despacho ordinario de los asuntos públicos,
absteniéndose de adoptar, salvo casos de urgencia debidamente acreditados o por
razones de interés general cuya acreditación expresa así lo justifique,
cualesquiera otras medidas”
¿Es urgente y
estaba debidamente acreditada la concesión de la prórroga que caducaba en 2018? En una situación de Gobierno en funciones ¿se
puede aducir razones de interés general para una prórroga de 60 años?
Parece que
no, pero si estamos hablando de una economía consentida que se basa en
capitalismo de amiguetes, es posible.
Todos los
partidos políticos de Galicia se oponen a la prórroga y van a tratar de reconducir la concesión ; el PP
que también se opuso en el Parlamento de Galicia, pero en las pasadas
elecciones, defendió la bandera de la prórroga, elecciones en las que no le fue
muy bien.
Pero como rezaba el proverbio
árabe citado al inicio “Un ejército de ovejas dirigido por un león podría
derrotar a un ejército de leones dirigidos por una oveja”
La fuerza de la razón, la fuerza
de la justicia y la fuerza de los ciudadanos lo pueden conseguir, lo hemos
hecho con el Cañón de Pau en Cotobade y con los Héroes de Puente Sampayo, en
1809, cuyo monumento al inicio de la Alameda, está de espaldas a la ría para no
ver, aunque seguro la padece, la fábrica de Celulosas.
José Manuel Cabada
Álvarez
